lunes, 16 de agosto de 2010

El coche eléctrico. Coste, viabilidad y mentiras que nos venden al respecto (Enérgéticas, Medio ambiente. 19)

El año pasado fue anunciado a bombo y platillo la implantación del coche eléctrico, por supuesto vendido como mucho mejor para los ciudadanos, para el trabajo, para la renta, para el medio ambiente, es decir, un poker de ases, como dijo el ministro Sebastián.

Analicemos el tema:
Para empezar, el coche eléctrico es bastante más caro que uno normal, con lo que supone un mayor coste para el ciudadano, y menos dinero disponible en su bolsillo.
En segundo lugar, está fuertemente subvencionado (el plan de ayuda consta de 590 millones €), lo que supone otro coste muy importante para el bolsillo del ciudadano, que tienen que pagar más impuestos para implantarlo (hasta 6000€ vamos a pagar de subvención por cada vehículo entre todos, pese a que luego lo disfrutará gente pudiente, a parte del coste de infraestructuras...).

Y cuando se vaya incrementando su uso e implantación, y por lo tanto la demanda de electricidad, cuánto subirá ésta? Porque UBS acaba de publicar que la luz subirá en España un 40% en 5 años (y sin considerar este elemento). Estos mayores impuestos e incremento de la luz en empresas supone más costes, y por tanto más despidos y menos empleo generado, y por tanto menos consumo de esa gente, y por tanto menos empleo indirecto, por lo que tampoco es mejor para el trabajo (destruye más empleo del que crea)
Además, este mes se ha conocido el fracaso hasta ahora del plan ya que durante los 7 primeros meses del 2010 se han vendido solo 16 coches (1 en 2009) frente a un objetivo de 2.000 coches para 2009-2010 (y hasta 250.000 coches hasta 2014).

Por último, veámos que implicaciones tiene para el medio ambiente:

Se dice que el coche eléctrico no contamina, ni produce CO2, que es mucho mejor..., pero esto dependerá del origen de la electricidad que emplea para funcionar. Por ejemplo, si la electricidad que emplea ha sido creada por carbón, creará mucho más CO2 que si es producido por eólicas o nucleares, por ejemplo.
El problema está por tanto, en que si se produce un incremento de la demanda de estos vehículos, se producirá un fuerte incremento de la demanda de electricidad, y por tanto, habrá que ver que fuente de energía se hace cargo de cubrir esta mayor demanda.

Ésta no se podrá cubrir con energía nuclear (ya que trabaja ya al máximos de sus posibilidades, y no puede aumentar su producción), con hidroeléctrica (también cercana a su máximo de producción, que depende del agua embalsada), ni con energía eólica o solar, cuya potencia instalada está creciendo a gran velocidad, pero su producción no depende de la demanda de electricidad, sino del sol o viento que hace, por lo que no podemos incrementar la producción aunque queramos, aunque la demanda de coches se incremente .

Por lo tanto, esto implica que el incremento de demanda (a excepción de una parte proveniente del incremento de capacidad de renovables, aunque con un coste muchísimo más caro) solo se puede cubrir con petroleo (fuel), carbón o ciclo combinado (gas natural), es decir altamente contaminante siendo por tanto falsa la idea que nos quieren vender de que "el coche eléctrico no genera emisiones", o que "reduce las emisiones de CO2", "que todo el consumo del coche eléctrico es renovable" y más aún que "es ecológico", "respetuoso con el medioambiente".

En definitiva, que utilizar un coche eléctrico supone aumentar el gas, carbón y fuel que se quema en el planeta y por tanto aumentar las emisiones de gases de efecto invernadero y los problemas medioambientales. Ah! y habría que añadir que nadie dice nada sobre que sus baterías no son reciclables y que su producción tiene un importante coste ecológico.

1 comentario:

  1. El medio ambiente esta muy de moda pero si el planeta es ya un vertedero. Solución muy tarde...

    ResponderEliminar

Twittear