lunes, 8 de noviembre de 2010

Después de pagar su rescate, ahora les pagaremos una indemnización. Genial. (Política, Economía. 201)

Nueva muestra de la estupidez a la que se está llegando en España.
Ahora resulta que después de pagar con nuestros impuestos entre 7 y 10 Millones de euros, a parte de los cuantiosos gastos de gestión de la operación y negociación, pretende que le paguemos una indemnización por su secuestro, y no Mauritania, no, sino los españoles que le hemos salvado.
Así, Albert Villalta, secuestrado a manos de Al Qaeda del Magreb Islámico, ha expresado su posición de victima del terrorismo y ha exigido esta indemnización, que sería además la máxima estipulada. Una indemnización fija de 12.000 euros y de 180 euros por cada día privado de libertad, con un límite de 36.000 euros. La cantidad máxima a percibir asciende, pues, a 48.000 euros. Si sus compañeros Roque PascualAlicia Gámez, la solicitan, el coste ascenderá a 126.180 euros (ya que Alicia estuvo 101 días con los que tendría derecho solo a 30.180 euros). A esto habría que añadir otra indemnización que exigiría por secuelas físicas y psíquicas.

Es realmente lamentable este tipo de situaciones considerando además la situación económica española.
Este señor y su "excursión" por Mauritania estaba más que avisada y advertida de la situación de riesgo del país e hizo oídos sordos. Cuándo la gente empezará a hacerse responsable de sus actos? Por qué  tenemos que pagarle de nuestros impuestos (y que nunca nos devolverá, ni siquiera agradecerá) una indemnización después de haberle pagado millones por un acto del que estaba ya advertido de no realizar? Qué valor tiene la vida de tantas personas que han muerto por no pagar un rescate? Vale más de 10 millones de Euros más la vida de muchísimas otras personas que morirán gracias a ese dinero, además de los nuevos terroristas que se formarán y se adoctrinarán?.

Este elemento que trabaja en el sector público y es responsable de la Direccion General de Túneles y Accesos de Barcelona y Túneles del Cadí, puesto ahí por ser quién es su padre, exconsejero de la Generalidad de Cataluña y que aprovecha el dinero público para irse de vacaciones pagadas, bajo las siglas de ONG, exige además el cobro de una indemnización.
Cada día entiendo menos el nombre de ONG, ya que son OG (organización gubernamental en lugar de no gubernamental), donde se dan a dedo tremendas subvenciones para vivir a cuerpo de rey en muchas ocasiones amistades, familiares y demás. Desgraciadamente, estas acciones y las muy frecuentes estafas de otras, que juegan con el sentimiento de las personas para estafarlas hacen muchísimo daño a las que realmente se desviven por ayudar a la gente de manera altruista.

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