miércoles, 6 de noviembre de 2013

Sin duda, una buena notícia. Cierra RTVV, la radio Televisión Pública valenciana. Una reflexión y los motivos de el porqué es una buena notícia. (Política, Economía. 2.157)

Hoy se ha anunciado el cierre de RTVV, la TV pública valenciana, tras el rechazo del ERE que afectaba a cientos de trabajadores.

Sin duda, una excelente noticia que debiera ser seguida por tantas otras cadenas públicas.


Obviamente, el aspecto negativo ante un hecho así es el despido de trabajadores que se ven directamente afectados, pero no hay que olvidar que son un número mucho mayor los que dejarán de ir al paro por los desastrosos efectos negativos que supone mantener con recursos públicos dicho ente.

Y es que cabe destacar la pésima gestión pública que se produce en todos y cada uno de los medios de comunicación públicos. Canal Nou no es desgraciadamente una excepción de mala gestión, sino que es la norma. No importa el gobierno o región a escoger (TV3 en Cataluña, Canal Sur en Andalucía, TeleMadrid, la TV de Castilla la Mancha...).

Todas y cada una de ellas sufren multimillonarias pérdidas con unos gastos disparatados muy superiores a los ingresos, con unas plantillas espectacularmente sobredimensionadas (con unas plantillas cada una superiores al conjunto de las TV privadas), y con un gasto salarial inflado y que supera en mucho los salarios de mercado, ya no digamos los salarios medios del país y de la gente que paga con sus impuestos dichos salarios (el ejemplo mismo en Canal Nou (y lo mismo vale para TV3 o Canal Sur por poner un ejemplo) es de más de 42.000 € por trabajador (72 millones de € para una plantilla de 1.700 personas).

Con deudas milmillonarias (otras TV es exactamente igual, solo que si dicha deuda no es la misma es porque vía presupuestaria cada año pagaban el déficit y no lo arrastraban), suponía un lastre enorme al ciudadano.

Y dichas deudas, gastos y pérdidas implican más impuestos a los ciudadanos, menos inversión en economía productiva, más recortes en otros temas esenciales, más intereses a pagar por la deuda acumulada y más impagos a proveedores al desviar dicho dinero a pagar este despilfarro.

Y todo esto implica mucho más paro en otros sectores que no se ve a simple vista (solo se ven o reclaman los despidos de Canal 9, que por supuesto son muchos menos de los que crea en otros sectores).

Pero efectivamente se destruye empleo en empresas que tienen impagos de la Generalitat por despilfarrar dinero en una TV pública (por supuesto entre muchas otras cosas, pero esta una y que hay que corregir), en empresas que deben de cerrar por subirse los impuestos para pagar dichas cosas y no puede cubrir sus gastos, en empresas que no reciben financiación porque la acapara el sector público (el denominado efecto expulsión o crowding out que está siendo espectacular en España), o familias que sufren recortes diversos en otras partidas por la incapacidad de mantener las promesas y la brutalidad de gastos llevados a cabo por los entes públicos (con dinero que no tienen ni tendrán)...

Y esto desde un punto de vista del contribuyente, puesto que hay muchos otros motivos para cerrar la TV pública (no ésta, sino todas).

La TV pública es exactamente lo mismo que la prensa pública. Igual que nadie entendería que volviera como en el franquismo la prensa del gobierno, no debiera haber una TV del gobierno. Las TV públicas sirven para la propaganda del partido de turno, para darse bombo y publicidad y para adoctrinar vilmente a todo espectador (y desde luego no solo en telediarios). Y esto es así gobierne quien gobierne. No debe extrañarse nadie porque en los países con dictaduras o en vía de ello, solo hay canales estatales, hay una voz única o trabas y presiones crecientes y constantes a todo medio contrario al régimen, siendo por supuesto el Estado el que tiene la única capacidad de dar o quitar licencias de emisión a los medios.

No hay que pasar por alto, todo la corrupción que genera (en contratación de espacios, externalización de producciones, subvenciones encubiertas que genera para el beneficio de terceros, amigos y afines...), ni por supuesto la colocación a dedo de la inmensa cantidad de gente (trabajadores o directivos) que conlleva, con unos sueldos por supuesto disparatados (que lo paga el contribuyente de turno).

Y esto implica compra de votos de distinta manera y competencia desleal también con otros partidos que no se publicitan ni de lejos de la misma manera.

Por supuesto, tampoco hay que olvidar las trabas a la competencia (eso con lo que tanto se llenan la boca en combatir cuando no están ellos por el medio y precisamente para justificar su intervención) que provoca su presencia, impidiendo la creación de otros medios que ocupen ese espacio si hay una demanda (creación de empleo y pago de impuestos), o bien a los que ya existen (menos ingresos por publicidad y menor pago de impuestos, competencia desleal al no poder los medios privados competir con los recursos públicos ("infinitos" al no primar la rentabilidad ni la buena gestión quedándose con espacios, series, eventos deportivos o retransmisiones por la que tenemos que pagar un "ojo de la cara" cuando se pagaría mucho menos en otros medios y sin coste para el ciudadano)...

Y por último, hay que alegar razones morales (y todo lo comentado anteriormente también tiene una carga considerable de razones morales o éticas). La TV pública implica quitar a la fuerza el dinero del contribuyente para beneficiar a terceros o a sí mismo. Una TV privada puede ser gratis o puede haber otras que tengan contenidos de pago (Canal Plus por ejemplo), pero no te quita el dinero a la fuerza, sino que o bien son gratis (gracias al pago de la publicidad) o bien es pagado voluntariamente por los clientes. Y esta además, es una de las grandes razones de la pésima gestión de las TV públicas. Que no responden ante el cliente.

Nadie debiera obligar a nadie a pagar por algo que no le gusta o no está dispuesto a pagar, porque igual le gusta pero no está dispuesto a pagar lo que nos cuesta de nuestros bolsillos (porque no gestionan bien) o bien hay ciudadanos que dicho dinero no lo quiere emplear en eso, que no es en absoluto básico, y prefiere gastarlo en su hijo, en un viaje, en educación, o en otro contenido de TV que no sea lo que ofrece dicha cadena.

Y si los valencianos creen que hay mucha gente que quiere una programación como la de Canal 9 o parecida, habrá un nicho de mercado para que aparezca una TV que emita aquello que demanda la gente. Y si no fuera así, menos razón para exigir a la fuerza que otras personas mantengan mi capricho.

Porque de la misma manera que yo no puedo exigir que me paguen (pongamos el salario medio en Canal 9) de 42.300€ (incluye las cotizaciones entiendo) por mi trabajo aunque no guste, nadie debiera imponerme a mí lo mismo.


4 comentarios:

  1. Debería usted verificar los datos de salarios y número de trabajadores. No ha dado ni una. Y si quiere tener un poquito de rigor, al menos, cite las fuentes.

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  2. Los datos están más que verificados. Se pueden comprobar en cualquier medio. Lo único que variará es el rango puesto que no se da una cifra exacta. Por ello ronda según la fuente entre 1.700 y 1.800 trabajadores en RTVV (radio y TV), de la que la inmensa mayoría pertenecen a Canal 9.

    Además, sí que enlazo la noticia como puede comprobar, de la misma página oficial de la Generalitat Valenciana, donde también confirma dichas cifras: Un número de trabajadores de alrededor de 1.700 y un coste salarial de 72 millones de €, lo que implica alrededor de 42.000€ por empleado. Por otra parte no debe confundir dicha cifra con el salario bruto, puesto que está incluido el coste de la seguridad social a cargo de la empresa (que supone cerca de un 30% de lo que se cobra y no sale reflejado en el salario bruto). Otro truco del Estado para robarnos el fruto de nuestro trabajo sin que nos demos cuenta. En 2010, por ejemplo, el coste para 1.800 trabajadores (700 eventuales) era de 75 millones de € (http://ftp.valenciaplaza.com/ver/3799/rtvv-gasta-75-millones-de-euros-anuales-en-salarios-y-seguridad-social-de-una-plantilla-superior-a-la-de-las-cadenas-privadas.html).

    Y antes de decir que no ha "dado alguien ni una" estaría bien argumentar y demostrar dicha "evidencia".

    Un saludo.

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  3. La intersindical habla que antes del ERE había 1.680 trabajadores y 110 cargos (oficialmente 89 cargos)

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  4. Otra confirmación del coste salarial de 72 millones: http://www.abc.es/20120817/comunidad-valencia/abcp-sindicatos-rechazan-salvar-despido-20120817.html

    El objetivo del ERE era rebajarlo a 28 millones

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